OLGA SUÁREZ

La región italiana de Emilia-Romaña es noticia estos días por las graves inundaciones que están sufriendo esta zona que es uno de los motores industriales y agrícolas del país transalpino. Pero también es un lugar importante a nivel pedagógico, pues en esta región nacieron en el año 1945, tras finalizar la segunda guerra mundial, unas pequeñas escuelas creadas por mujeres trabajadoras para que sus hijos pudieran recibir educación mientras ellas trabajaban. Una de las personas que trabajó para crear estas escuelas fue Loris Malaguzzi, creador de un método educativo que se ha repetido en numerosos países y que conocieron de primera mano en marzo un grupo de docentes del colegio Liceo La Paz de A Coruña, gracias al programa Erasmus. «Hablar de Malaguzzi es hablar de aprendizaje cooperativo, de la importancia de los espacios y de las estructuras, de los ambientes, de los materiales y de la calidad del acompañamiento educativo», explica Rosa Parada, profesora de Educación Infantil y jefa del departamento de Orientación del centro coruñés que participó en el viaje.

Celebrado durante la primera semana de marzo, el viaje dejó un importante poso en el interior de los educadores que participaron en él, Purificación Rivela, maestra de educación Infantil y profesora del ciclo superior de Educación Infantil; David Míguez y Pilar Sande, ambos también docentes del ciclo de FP; y María García, profesora de apoyo especialista de Educación Infantil.

El viaje les llevó a conocer desde dentro dos centros, la Scuola del Bosco Pecorile y el International Experiential School de Reggio Emilia. El primero es un centro que imparte solo Educación Infantil, mientras que el segundo cuenta con alumnado de todas las edades. Rosa Parada describe los espacios educativos del primero, con «aulas, pasillos, laboratorios disponibles para entrar y aprender de lo que se está desarrollando, con puertas de cristal y espacios polivalentes donde los profesores han evolucionado, de ser proveedores de contenidos, a mentores y gestores de talentos muy diversos».

Esta profesional de la educación con más de 30 años de experiencia insiste en la necesidad de que los profesores sean «acompañantes del aprendizaje para mostrarles cauces, hacerles ver sus potencialidades, porque hay muchas formas de aprender». Y reconoce que en Italia, donde el sistema educativo es similar al español, la clave diferencial está en la pedagogía; y destaca la buena calidad de la educación pública en esta del norte del país. Allí se encontraron con maestros muy bien formados, centrados en dar al alumnado «herramientas que les valgan para cualquier profesión, como la empatía, la curiosidad o el trabajo en equipo». Y en este sentido, destaca la importancia de recuperar la filosofía en la eduación básica.

Compartir en Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir en WhatsApp

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies