Introducción

 

En los últimos meses los medios de comunicación se han hecho eco de la presencia de nubes o boinas de contaminación sobre grandes ciudades de diferentes partes del planeta. La intensa actividad industrial, el mayor consumo de combustibles de calefacción y el elevado tráfico de vehículos emiten a la atmósfera gran cantidad de humos contaminantes. Si a ello se suma unas condiciones meteorológicas anticiclónicas prolongadas, con ausencia de lluvias y de vientos que puedan dispersar la contaminación, se favorece la formación de estas boinas que cubren las ciudades. El riesgo que implica para la salud la composición de este aire obliga a las autoridades a tomar medidas. Madrid, Roma, Milán, Nápoles o Pekín han sido noticia recientemente por este motivo.

Compartir en Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir en WhatsApp

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies